Tipos de acero hay varios, pero ¿cuáles son los mejores de todos los que podemos encontrar? Hoy, desde Recuperaciones Grugar, queremos hablaros de ellos.
- Titanio: Puede que sea el más reconocido de todos. Es un metal extremadamente resiste para la ligereza que tiene. Sus propiedades mecánicas son sorprendentes si se compara con su densidad. Podríamos decir que, en lo que a sus características se refiere, son parecidas a las de cualquier acero, pero con la diferencia de un 40% más ligeras. Esto es algo que puede apreciarse en cuadros de bicicletas de competición o alto nivel, o incluso en los fuselajes de los aviones. Por otra parte, también se utiliza para hacer tuberías que estén en continuo contacto con sustancias corrosivas.
- Molibdeno: Este metal es de transición con uno de los puntos de fusión más altos de todos los elementos. Para encontrar sus primeras aplicaciones deberíamos remontarnos hasta la Primera Guerra Mundial. Se le conoce por su alta resistencia a las altas temperaturas y por su capacidad para soportar el efecto de los ácidos potentes. Es normal que se utilice en la industria nuclear y, de últimas, también es posible encontrarlo en las antenas rectificadoras.
- Wolframio: Es mucho más que denso, concretamente, hasta un 60% más que el plomo. Es por ello que se usa como contrapeso en aviones o barcos, además de que es un buen recipiente para los materiales radioactivos.
- Carburo de tungsteno: Antes de nada, hay que destacar que el tungsteno y el wolframio son el mismo metal. La diferencia está en sus aplicaciones. En este caso, es muy utilizado para crear municiones, herramientas de corte para mecanizado, equipamiento quirúrgico o joyería. También es muy resistente a ácidos y sólo es atacado por el ácido fluorhídrico / ácido nítrico.