Hay muchos metales, como puede ocurrir con el estaño, del que hemos hablado recientemente, que se encuentra presente en muchos aparatos pero que, una vez llegado el fin de su vida útil, no se gestiona como es debido. Esto hace que se desperdicie mucho. Sin embargo, esto no debería ser así ya que muchos de esos objetos son responsabilidad de las administraciones públicas, algo de lo que hoy os hablamos desde Recuperaciones Grugar.
Las administraciones públicas deberían asegurarse de que se cumple la ley, y es que muchos desconocemos que, cuando compramos un nuevo móvil o cualquier otro tipo de dispositivo semejante o aparato electrónico, se establece un vínculo entre nosotros y el fabricante. Este vínculo hace que, cuando vamos a desechar el aparato, sea el fabricante quien se encargue de la situación y de que se haga una buena gestión del mismo.
Sin embargo, no suele hacerse en la mayoría de los casos, lo que genera que muchos materiales se echen a perder. El problema se da por varias razones:
- No se informa bien al consumidor de que puede contactar al fabricante para que se haga cargo del aparato una vez que ya no sirve.
- Las administraciones públicas no se cercioran de que las empresas en sí se hagan responsables de este tipo de gestiones cuando, además, es algo por lo que están cobrando al hacer la venta del producto.
Si la situación fuera diferente, muchos de los materiales que se pierden podrían volver a ser utilizados y, por lo tanto, se reduciría la explotación de ciertos recursos. Desde Recuperaciones Grugar estamos concienciados con ello y es por esto por lo que siempre procuramos llevar a cabo nuestros servicios de gestión de residuos de la manera más correcta posible.