En mayor o menor medida, todos usamos metales, pero hay algunos que se utilizan más que otros, como ocurre con el aluminio, que es el tercero más consumido tras el hierro y el acero. Hoy, desde Recuperaciones Manuel Grueso, queremos contaros algunas curiosidades sobre este metal.
Comenzaremos contándoos que es un elemento muy abundante en la corteza terrestre, de hecho es el tercero después del oxígeno y el silicio, y que se extrae de la bauxita, un mineral llamado así debido a que se encontró en la región francesa de Les Baux.
Por otra parte, también os podemos contar que la primera vez que se consiguió aislar el aluminio fue en 1825 y que la hazaña la realizó el físico y químico danés Hans Christian Oersted. Sin embargo, ese aluminio no era puro, para obtenerlo de esta forma hubo que esperar a que lo lograse el químico alemán Friedrich Wöhler en 1827.
De igual forma, a finales del siglo XIX, los químicos Charles Martin Hall (EEUU), Paul Hérault (Francia) y Karl Josef Bayer (Austria) patentaron procesos para poder extraer el aluminio y, posteriormente, redujeron el coste del proceso de producción, haciendo posible su uso en la industria.
Por último destacamos que el aluminio es un metal muy fuerte, duradero, flexible, ligero, muy resistente a la corrosión y que puede ser utilizado muchísimas veces puesto que es posible reciclarlo de forma infinita.