El pasado año 2015 España recicló más de 700.000 toneladas de envases de vidrio. Este dato significa que los españoles reciclamos un 5% más que en 2014. Y con una tasa del 67,7%, nos colocamos por delante de las exigencias europeas y españolas. Se ha calculado que se expulsaron casi medio millón de toneladas menos de CO2 a la atmósfera.
Además, las ciudades mediterráneas son las que muestran un mayor nivel de conocimiento respecto a la influencia de la actividad humana sobre el cambio climático. Las acciones más comunes son la reutilización de las bolsas de plástico, el uso de bombillas de bajo consumo, el reciclado de papeles y otros materiales en el hogar, el reciclado de botellas, tomar más duchas en lugar de baños, dejar apagados los electrodomésticos con el botón y no en posición de stand-by y comparar la información sobre eficiencia energética cuando adquieren un electrodoméstico.
La media de reciclaje se sitúa en 15,5 kilos por habitante, aunque podemos encontrar diferencias entre las distintas regiones:
Así, Baleares se encuentra en el primer puesto, con 33 kilos por habitante. Sin embargo, Madrid está un poco lejos de esta región, con tan solo 12 kilos. Un dato curioso es que se estima que con todos los envases recogidos desde 1998 se hubieran podido llenar dos pirámides egipcias del tamaño de Keops.